La hipersudoración, también conocida como hiperhidrosis, es un trastorno que provoca una sudoración excesiva, afectando especialmente a áreas como las axilas, manos y, en algunos casos, el rostro. Este problema puede resultar incómodo y afectar la vida diaria de quienes lo padecen.
Para tratar esta condición, uno de los métodos más eficaces es el uso de toxina botulínica tipo A, comúnmente conocida como Bótox. Este tratamiento funciona bloqueando temporalmente la actividad de las glándulas sudoríparas en las áreas afectadas, como las axilas y las palmas de las manos, reduciendo significativamente la sudoración.
Este procedimiento está recomendado para personas que experimentan una sudoración excesiva que interfiere con sus actividades diarias y afecta su calidad de vida. Si has probado otros métodos sin éxito, el tratamiento con toxina botulínica puede ofrecer una solución eficaz y duradera.
El procedimiento es relativamente rápido y sencillo. Se inyecta toxina botulínica directamente en las áreas problemáticas, como las axilas o las palmas, donde actúa bloqueando temporalmente las señales nerviosas que activan las glándulas sudoríparas. Aunque el efecto es temporal, la reducción de la sudoración puede durar varios meses, tras los cuales se puede repetir el tratamiento según sea necesario.
El tratamiento con toxina botulínica ofrece resultados notables en la reducción de la sudoración. La mayoría de los pacientes experimentan una disminución significativa del sudor en las áreas tratadas, lo que les permite disfrutar de una mayor comodidad y confianza en su vida cotidiana. Aunque los resultados no son permanentes, pueden mantenerse durante varios meses, después de los cuales se puede repetir el tratamiento.
El Dr. Juan Peñas es uno de los cirujanos plásticos más reconocidos del país. Con casi cuatro décadas dentro del mundo de la cirugía, realiza alrededor de 700 intervenciones al año, siendo la naturalidad la clave de su éxito.
Todas sus intervenciones se realizan en el Hospital San Rafael de Madrid.
Saber más